Jaguares
Una especie de América
De todos los felinos que se agitan en las tierras americanas, el jaguar es el más grande de todos ellos. Su pelaje moteado, su poderosa mandíbula, sus ojos brillantes y su cuerpo musculoso le dotan de una belleza legendaria, que ha traspasado los años y las civilizaciones.
Su nombre científico es Panthera onca y hasta el momento no se le reconocen subespecies. Es un mamífero carnívoro que solo se encuentra en América, pero sus ancestros fueron probablemente oriundos de Asia. Hace varios siglos habitaba una gran zona de Norteamérica hasta Sudamérica, aunque hoy su distribución es mucho más fragmentada y en el norte del continente los avistamientos en los estados de Arizona, Nuevo México y Texas (Estados Unidos) han sido extremadamente raros.
Pertenece al género Panthera y es considerado uno de los “grandes felinos”, ya que al igual que el león, el tigre y el leopardo, es capaz de rugir. Su tamaño es superado únicamente por el león y el tigre. Los nativos americanos fueron grandes admiradores del jaguar y lo integraron a su cultura: las leyendas, los mitos, las historias fantásticas, las creencias religiosas y el arte se impregnaron de la figura de este felino, e incluso se le elevó según la existencia de dioses y semidioses que adoptaron su forma. Un ejemplo de esto es el dios Tezcatlipoca de los aztecas y la diosa Ixchel de los mayas, representados en pinturas, grabados y esculturas.
En realidad, el jaguar es una especie solitaria y algo evasiva. Suele habitar regiones con vegetación espesa, cuerpos de agua disponibles y abundancia de presas. Prefiere sitios donde pueda tener refugio entre la hierba para acechar a sus presas desde cierta distancia. No caza igual que el león o el guepardo: en vez de realizar veloces persecuciones, perpetra emboscadas. Cuando detecta una presa se acerca de forma lenta y sigilosa hacia ella, y llegado el momento correcto, salta hacia ella para morder su cuello o su cráneo. Dicho sea de paso, es el único felino que mata por perforación del cráneo, debido a las potentes mandíbulas.
El felino con la mordida más potente es un carnívoro exclusivo. Sobrevive a base de una dieta donde predominan los pecaríes, los ciervos, los tapires, caimanes, tortugas, serpientes, monos, puercoespines y hasta peces. El agua no le produce el más mínimo temor, ya que nada bastante bien. ¡Un auténtico (y literal) amazona!
Datos sobre el Jaguar
- Es el felino más grande de América.
- Su dieta está compuesta por más de 85 especies animales.
¿Cómo no admirarlo? A pesar de sus escasas habilidades sociales, puesto que se trata de una especie naturalmente solitaria, no tiene un pelo de tonto al momento de encontrar pareja. Por supuesto, está facultado para detectar parejas sexualmente receptivas. Cuando una hembra está en celo aumenta sus vocalizaciones y los machos hacen lo propio, acudiendo al llamado de apareamiento. Tras la cópula ambos se separan y el macho tiene que alejarse completamente, ya que ella no tolera su presencia.
Tras un período de gestación de unos 91-111 días, las hembras tienen camadas de 1 a 4 crías que nacen con los ojos cerrados. En esta época los machos tampoco deben acercarse y mucho menos tomar parte en el cuidado de los pequeños, ya que la madre puede cometer canibalismo infantil. Si esto no ocurre, se encarga devotamente de enseñar a sus crías a cómo sobrevivir en la selva.
La población total del jaguar está amenazada por el ser humano. Concretamente, por las actividades de éste, tales como la deforestación, la persecución y la caza comercial. La pérdida de su hábitat forestal es un peligro constante para una especie que depende mucho de la vegetación. Por otro lado, se le ha considerado una amenaza para el ganado doméstico ya que ocasionalmente se alimenta de él, así que los ganaderos van en su búsqueda para eliminarlo.
La conservación del jaguar es un asunto importante para el mundo, toda vez que su presencia es parte de la naturaleza y su cadena alimentaria. No dudes en conocer a este magnífico felino, ¡te sorprenderá!