Reproducción del Lince
Las 4 especies de linces comparten algunas características de sus hábitos de reproducción, aunque claro, puesto que viven en regiones geográficas separadas y son especies distintas unas de otras, presentan diferencias en aspectos como la temporada de apareamiento y el período de gestación.
Lince, datos básicos
Clase: Mammalia
Como todo mamífero, los linces se reproducen mediante fecundación interna. ¿Qué significa esto? El macho tiene que transferir el esperma dentro del cuerpo de la hembra, para que un óvulo y un espermatozoide se unan y a partir de entonces comience a desarrollarse un embrión.
Los mamíferos también identifican por las mamas de las hembras, que tienen la función biológica de alimentar a las crías. Cuando éstas nacen son tan pequeñas e indefensas que dependen completamente de la madre, el padre o ambos, para sobrevivir durante sus primeros días, semanas o meses. Entonces, por instinto comienzan a beber la leche que su madre les facilita.
Por lo general, los mamíferos pasan cierto período de tiempo con sus crías y entablan con ellas un vínculo que puede ser temporal o indefinido. En el caso de los linces, pasan con su madre un par de años y después se independizan.
Familia: Felidae
Los linces son felinos, es una verdad universal. No son tan grandes como los tigres, pero tampoco son pequeños como un gato doméstico. Los felinos suelen tener más de 2 crías en cada ocasión. Son animales solitarios con excepción del león, y solo se encuentran cuando necesitan reproducirse y cuidar de las crías.
Género: Lynx
Son animales polígamos; si una hembra embarazada pierde a su descendencia vuelve a entrar en celo para quedar preñada de nuevo. Las crías son muy pequeñas al nacer y se gestan en el útero durante no más de 3 meses.
Ahora bien, estas son las características más importantes que debes conocer sobre los hábitos reproductivos de los linces:
Cortejo
La mayoría de los linces comienzan a reproducirse entre el primer y tercer año de vida, pero esto varía en cada especie. La temporada de apareamiento del lince euroasiático abarca enero a abril, regularmente en febrero-marzo para el lince rojo, marzo a mayo para el lince canadiense y enero y febrero para el lince euroasiático.
Cuando la hembra entra en celo deja marcas de olor en los objetos de la naturaleza (rocas, árboles, etcétera) y de igual modo que el macho, aumenta la emisión de vocalizaciones. La hembra de lince ibérico sale de su refugio en busca de un macho, pero el macho de cualquier especie también puede acudir a ella.
Curiosamente, macho y hembra pasan juntos algún breve tiempo antes de aparearse. En este lapso pueden perseguirse y realizar otros tipos de interacciones físicas. Cuando ambos están listos, copulan de manera repetida, hasta 6 veces en 1 hora. Posteriormente la hembra puede copular con otros machos o bien, el macho busca otras hembras. Depende de la especie, ya que la hembra del lince canadiense solo se aparea con un macho en cada temporada de reproducción, pero la del lince rojo es capaz de aparearse con más de un macho durante dicha temporada.
Hermosa cría de lince de dos meses de edad.
Gestación
El período en que un lince se gesta dentro del cuerpo de la madre dura alrededor de 2 meses, con diferencias de días entre cada especie. Generalmente, el período dura entre 60 y 70 días.
Las camadas pueden tener de 1 a 8 crías, pero a menudo la madre tiene de 2 a 4 pequeños. Éstos nacen en alguna guarida ubicada entre la vegetación, entre las rocas, en cuevas o en alguna madriguera abandonada de otro mamífero.
Crianza
Los primeros días de las crías transcurren en la oscuridad y en condiciones de casi inmovilidad, ya que sus ojitos permanecen cerrados y apenas pueden sostener su cuerpo sobre las débiles patas. Durante las siguientes semanas se alimentan de leche materna y a partir de las 12 semanas pueden ser destetados, aunque otras especies extienden la lactancia hasta después de los 5 meses de edad.
La madre provee la carne para sus crías cuando éstas aún no saben cazar, pero conforme pasa el tiempo los pequeños acompañan a su progenitora en las actividades de caza. Cabe mencionar que el padre tiene una participación nula en la crianza de las crías, por lo que la responsabilidad recae únicamente en la hembra.
El juego forma parte del desarrollo de las habilidades de caza de los pequeños linces. No es raro verlos jugar entre ellos y con la cola de su madre, que pacientemente permite los saltos, los mordiscos y las inofensivas luchas cuerpo a cuerpo.
Algunos linces se separan de la madre poco antes de su primer año de edad o lo hacen al alcanzar la madurez sexual.